Escribí un poema rencoroso acerca de la medicina. También ha estado rondando en mi cabeza la figura de mi abuela Rebeca. He tenido un par de sueños relacionados. Pesadillas en realidad. Pensé que quizás ella tiene algo que ver.
También puede ser por la toz que tuvo el julian. Estuvo sintiéndose medio mal hace poco. Pero su espíritu siguió intacto casi todo el tiempo. Un par de noches con fiebre. Un poco de vómito. Dolor. En el fondo no fue tan grave pero sí molestoso. Creo que hice lo mejor que pude para cuidarle y estar ahí para él. Justo estuve pasando en la casa cuando se puso peor. Le acompañé.
Bueno. ahi surgieron un montón de cosas que sí estuvieron mal. Cosas con la martu. Preferiría olvidarlas del todo pero no puedo. Preferiría esconderlas en algún hueso roto de mi cuerpo. En la clavícula. En todo caso. No voy a hablar de eso hoy día.He hecho cosas los últimos días.
Más o menos un poco de todo. Ayer subí a quito. Anteayer estuvce en la casa hasta las 7pm. de ahi sali para el repaso. por las noches, Pesadillas. pero una sensación de entereza justo depués de que amanece. El aire cristalino, los colores intensos, el espacio abierto del arenal me ha traido mucha calma luego de la tormenta. Me ha ayudado a estar tranquilo. También cierta lectura más o menos constante de Sandman. Es lo único que de veras he leído en los últimos tres o cuatro meses. Y cierta sensación heroíca que no se de donde viene. Mi abuela Rebeca puede tener algo que ver. Tenemos una cachorrita. Golden. Se llama Nuala.
Dos imágenes del julius.
El otro día estuvimos en la casa todo el día. Yo trasplanté unas palmeras y algunas hiedras. Les saqué de una maceta que ya se rompía de lo vieja y las metí en la tierra (mucha actividad en mi jardín ultimamente). El julian correteaba. Iba y venía. Contaba historias de sus amigos y se reía. Pedía que le cambie de camiseta, de medias de zapatos a cada rato (es su cosa ahora). Luego preparé el alumerzo. Papas cocidas. Un filete de pollo (esos que vienen congelados). 11 empanadas de verde (también de las que vienen congeladas). Herví un poco de brocol y corte en rodajas un pepinillo. Estuvo delicioso. Comimos afuera. El julian y yo. La nuala por ahí. El julian no para de comer. No se por qué pero estaba llucho en ese momento y más extraño sólo tenía medias de diferentes colores y solo un zapato puesto. Después de comer me acosté un rato en la hamaca y le miré al julian. Esa es la primera imagen.
La segunda.
Ayer de noche la martu prendió velas en el cuarto. Luego el julian quiso apagarlas usando uno de esos como sombreritos de gnomo metálicos para apagar velas. Su carita cerca de la luz de l vela. El resto del cuarto oscuro. Con el apagador de velas en la mano la luz iba y venía hasta que finalmente se apagó. Esa es la segunda imagen. No se si me hago entender. Luego. El julian topó el sombrerito de mnetal y se quemó el dedo. Nada grave. Solo un ardor nuevo. Pobrecito. Seguro que aprendió.
Ahhhh... el poema. Ahí va