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Otro día de vacaciones con el julian. La martu ya volvió al trabajo. De mañana nos fuimos a donde las acupunturistas. El julian está con un poco de gripe. Anoche empeoró. Me parece que no lo había mencionado. Le aplicaron calor. masajitos. Es un lugar agradable. Las doctoras transmiten confianza. Volvimos a pie a la casa. Caminamos largo. El julian metiéndose a los charcos. Luego quiso que le amarque. Lleegamos con las justas. Era un poco pasado el mediodía. Almorzamos. Luego el julian se echó un rato y le puse Bambi. De chiquito era una de mis películas favoritas. Es de las pocas de Disney en las que no hay seres humanos (excepto los cazadores que nunca llegamos a ver realmente) la otra es El rey león, que si se fijan bien, está basada parcialmente en Bambi. Yo aproveché para trabajar en un artículo. me preparé una taza de café. Escuchaba como el julian se reía con las caídas del joven Bambi, aprendiendo a caminar y correr y deslizarse por el hielo con Tambor el conejito. Fui al estudio. Luego nos juntamos otra vez. El julian estaba cansado pero salió al jardín nuevamente. Jugó con nuestro conejo que estaba suelto. Se reía. Lego lloró. Estaba cansado pero no se durmió. Lucha intensamente en contra del sueño a veces. Pedía chocolate. Lucha intensamente por el chocolate también. En todo caso se mantuvo en pie. Le puse pañal, pero no quería saber nada más de ropa. Alcancé a cambiarle la camiseta que estaba sucia de todo el día. Luego llegó la martu y yo vine acá. Buen día. Acabé el artículo. Empecé un libro. Las vacaciones se terminan. Mis 26 años también.