Anoche llegué del repaso tipo 11. La martu estaba tratando de descansar pero el julian seguía despierto. Estaba super tierno. "Hola, taita" me dijo. Luego le dí un beso a él y a la martu y el julián me hizo acuerdo de darle un beso a la ñañita también.
Nos pusimos a jugar con los animales de África. En su cuarto. El me preguntó si el león comía frutas. Le dije que no. Luego, con el león en mi mano ataqué a la girafa. El julián se frustró rápidamente. Agarró la girafa y la hizo salir corriendo. Entonces yo le dije que el león perseguiría a la girafa bebé. Y él la llevó a salvo. Luego ataqué a la zebra y lo mismo. Luego ataqué al hipopótamo. Y el julián con el hipopótamo se defendió y peleó con el león. Luego de la pelea el julián trajo una manzana de felpa, de juguete que tiene y le dio al león. Ahí se puso feliz y le decía al león que coma la manzana. El león empezó a mordisquear un poco desganado.
El julián tiene problemas aceptando esa violencia inherente que constituye comerse las unas especies a los otros. Se pone mal cunado ve en la tele uno des esos documentales acerca de la vida de los animales. No le gusta que gaviotas coman a pinguinos bebés, que leopardos cazen a gazelas, ni siquiera que osos pesquen. Odió cuando la Nuala le mató a la gallina.
En mi intento por hacerle aceptar eso de la manera más natural, le he dicho un sinfin de cosas. LE he puesto a pensar que él también come gallinas, aunque no las caze personalmente. Es increíble como el julian aboga por el vegetarianismo, por lo menos en los demás, desde tan pequeño. Yo creo que nos hará entrar en conciencia de muchas cosas en el futuro. Ojalña le escuchemos.
Yo tuve una racha de vegetarianismo que terminó de una manera fresca y natural: acepté lo que otros me brindaban y pum. Luego de un año, ya comía carne de nuevo. Es un proyecto pendiente. Me gustaría regresar a él algún rato.
Anoche yo le observaba al julian y aceptaba sus propuestas. El estaba tranquilo. Creo que la martu tuvo algo que ver con eso. Yo tenía un poco de dolor de estómago y de cabeza pero también estuve tranquilo. Tuvimos una hora o un poco más de juego tranquilo. Luego nos acostamos juntos, en su cama, y se durmió frescaso. Ya estaba cansado él también.
Ultimamente está sacando, de muchas formas, su incomprensión acerca de la ñañita. No le gusta alistarse, vestirse, por ejemplo, nos complica en ese sentido. Pero no es culpa suya. Está sacando incomprensiones. Espera con ansiedad la venidad de la bebé, pero no sabe qué mismo significa eso, igual que la martu y yo supongo.
El julian me ha dado grandes momentos de felicidad y completitud. También me ha traído dudas e incomprensión. Me he angustiado y he aprendido a querer. Prefiero los momentos como anoche, pero es imposible vivr siempre así. Aunque nunca se pierde la esperanza de que así sea, de que sí pueda ser un padre paciente y amoroso. Nunca se debe perder la esperanza.
Ayer llegó la noticia que esperé las últimas semanas y que pensé por un momento que me evadía. Llegó. Mantuve la esperanza a pesar de que el paso del tiempo indicaba que era poco posible. Y bum. Una llamada a las 7 de la mañana que no contesté. Ni siquiera bajé a escuchar el mensaje. Y luego cuand sonó el teléfono otra vez a las 10, cuando la martu y yo seguíamos en cama, el julian nos trajo el celu., La martu escuchó los mensajes y empezó a sonreír. A reírse a carcajadas y decía "no puede ser, jajaja" Y yo sabía lo que estaba esperando. Cuando menos lo esperaba. Por lo general es así. BIEN. Me emocioné. Fue un gran momento. Y fue un buen día.
El día anterior había participado como escrutinador electoral. Fue cansado. Pero cumplí. Tranquilo. Fresco. Y el día siguiente, bum. Todo cambia.
Y debería añadir: pero nada se pierde por completo.
Estoy otra vez leyendo esos textos mágicos de Sandman. Mi viejo me trajo de NYC dos volúmenes. Gracias, pa. Me da mucha energía y fuerza leer Sandman. Es lo mejor.